jueves, 10 de noviembre de 2011

Al vacío por favor.

Ya se van apagando las luces de este mi vehículo al vacío y mientras se marchitan en la oscuridad junto a ellas se va mi amor, en infinitos trazos gruesos que rompen mi alma en mil pedazos, desestructurándola por completo. Mientras tanto la luna brilla en lo alto del horizonte, impasible a lo que pasa a sus pies, grande y gloriosa balanceándose en la más suave melancolía. Me recuerda a su sonrisa, aquella que me evade de mi arduo día a día, y cada noche me pregunto qué es lo que tiene tus besos para que me lleven a otro universo... de que forma me mira que el tiempo se detiene a su alrededor, tornándose sumiso a él y obedeciendo sus órdenes. ¿Qué es lo que me da? Seguro que obtendré por respuesta que recibo lo más ínfimo, pero creo que jamás sabrás cuanto significa lo más ínfimo para mí.




jueves, 29 de septiembre de 2011

Frívolos domingos cálidos.

Puedes decir que me valla, puedes decir que me marche, que abandone o que te gane, que te consiga o que te pierda, aun que ya no me digas nada y el mero recuerdo de mí sea borroso en tu cabeza. Mísero momento que marco mi vida, y no sé por que todavía hoy me atormenta ese recuerdo del pasado.. Aquel recuerdo que mantengo de una tormenta tropical en pleno enero, breve, pero intensa, y tras ella una cálida luz que hace que todo brille con las gotas que desprendió antes aquella aérea furia. ¿Gotas? tal vez mis lagrimas, ya ni me acuerdo, sólo los surcos de mi cara demuestra que fue verdad lo que mi cabeza me dice y lo que mi corazón se niega a admitir. ¿Te pude llegar a querer? me pregunto, y automáticamente me respondo: Sí, por eso cometí aquella atroz locura. Pero no puedo por menos que decirme a mí mismo: ¿y te sigo queriendo? y entonces es cuando un gran surco se abre en mi corazón y el silencio lo calla todo... 




domingo, 5 de junio de 2011

.

Cuando no sabes si es sueño, cansancio, desesperación o simplemente ganas de dejarlo todo de una vez.

domingo, 22 de mayo de 2011

domingo, 15 de mayo de 2011

En busca de la dosis diaria de felicidad.

Un día encontré una cálida sonrisa guardada en mi desordenado desván. Una sonrisa guardada con mucho temor y cariño, dentro de una minuciosa caja llena de suave algodón. Temía salir a la luz por las consecuencias que podría desencadenar, tenía miedo de hacerme recordar el pasado, pero ése día yo quería revivir mi vida, quería sufrir y cantar, reír y llorar, y esa mísera sonrisa era capaz de encender la llama de mis temblorosos sentimientos. Grandes mentiras rondaron por mi cabeza cuando la despojé de sus algodones, grandes expectativas que jamás cumplí, elocuentes promesas que nunca tuvieron lugar y desgarradores momentos que provocaban que una dulce lágrima acariciara mis mejillas.
Una única sonrisa que me recuerda a la suya,, a su olor, a su calor, a sus ojos, una única sonrisa que consigue evadirme del mundo, una única sonrisa que me encantaría volver a sentir, una única sonrisa, su sonrisa.



domingo, 1 de mayo de 2011

Deseos casi-posibles.

Que llegue el 3 de Julio del 2011, me agarres de la cintura, me tapes los ojos, me des un beso y me plantes dos entradas para ver a Russian Red en Salamanca...¿Crees que mi deseo se cumplirá o pido demasiado? 

XII

lunes, 28 de marzo de 2011

Hasta el infinito y más allá de los más allases.

Ven, sube conmigo al tejado y siéntate a mi lado. Agárrame la mano con fuerza, deja que apoye mi cabeza sobre tu hombro, y permíteme que te susurre al oído un "te quiero" tantas veces como estrellas hay en el universo. Ven, haz que esto sea mágico, que dure para siempre, que jamás el tiempo pase sobre nuestros cuerpos. Dime un "siempre" bajo esos rayos mágicos que dan a tu rostro una aspecto sobrehumano. Cógeme por la cintura y bésame como nunca antes lo habías hecho, por que tengo la sensación de que si me besas ahora, nuestro presente será nuestro futuro, ese futuro que viene acompañado de un "siempre".


            

miércoles, 23 de febrero de 2011

Dulce calor.

Sí, el calor por fin abraza mi cuerpo, por fin calienta cada centímetro de mi helada piel, vuelvo a sentir la sangre recorriendo mis venas, cómo mis dedos se estiran y cómo una sensación de tranquilidad me golpea fuertemente. Extiendo mis brazos y siento como la hierba crece a mi alrededor, cómo el sol baña mi pelo de esos tonos dorados que tanto he echado de menos, cómo doy un abrazo a la nada. Cierra los puños, respira profundamente, nota ese olor a hierba recién cortada que rebota por las paredes de tus pulmones. Enciendete un cigarro y ríete del pasado, ríete de ti mismo, exhala todo el aire y después vuelve a respirar. ¿ Te encuentras mejor? Pues miénteme y dime que no, por que hoy no pararé hasta que no sientas el mismo calor que mi cuerpo tanto a anhelado. Hoy no parare hasta que sea capaz de reírme de ti en tu propia cara.



viernes, 18 de febrero de 2011

Breves consejos.

Empecemos, seré breve y conciso, nada de sandeces y falsas palabras que no llegan a ningún camino ni a ninguna aclaración.
¿Que quieres que te de un consejo? Pues muy bien, el primero será: Que me olvides. Tres meras palabras que lo dicen todo. Olvida todo, todo fue una mentira y un engaño , nada de lo que te decía era verdad, nada.¿ Vas asimilando o espero unos instantes a que te sitúes?
¿ Que quieres que te de otro consejo? Pues muy bien, el segundo será: Desaparece de mi vida. Sencillo y simple, esfúmate, lárgate, desvanécete, dilúllete, evapórate... sin más, simplemente desaparece.
¿Que quieres que te de otro consejo? Pues muy bien, un último consejo por ser tú: Que te jodan. Creo que prescindo de aclaraciones, algo transparente como el agua, otras tres meras palabras que si no entiendes ya no es por mi culpa, dale las gracias a tu corta y subdesarrollada inteligencia. Escaso de imaginación dices ser, escaso de juicio digo que eres; ¿sinónimos o antónimos?, para mi palabras idénticas, cuyo punto en común eres tú.



jueves, 17 de febrero de 2011

Instintos carnales.

Sí, hoy es una noche especial, hoy es una noche de luna llena; ¿y sabes lo que dicen sobre estas noches? que noche de luna llena, noche de lobos. Así que ya sabes, ¿por qué no sacas esa salvaje fiera que está encerrada en tu profundo interior? Simplemente profana un desalentador alarido a la noche, plantale cara a las estrellas, demuestra que vales más de lo que el mundo cree. Grita para olvidar tus penas, grita para olvidarte de tu vida, grita para darle la bienvenida a los instintos más salvajes y carnales que se guardan bajo llave detrás de esa máscara de felicidad que luces a cada momento. Da paso a una noche de agresividad y locura desenfrenada. Déjate llevar por el momento, deja que te invada, que posea tu cuerpo, como si hoy fuera tu último día en la tierra. Pierde la cabeza, llama a la locura, despídete de la desesperación, simplemente ven, con tu lado mas salvaje a recibirme como me merezco. Luna llena noche de lobos, luna llena noche de instintos. Y, ¿ya estás listo para gritar? entonces ven y no esperes más, grita como nunca antes has gritado.
Convirtámonos en salvajes fieras de la noche y arrasemos con el mundo a nuestro paso.

martes, 15 de febrero de 2011

¿Podrás decir adiós al sol?

Una vez más hoy es una noche de rastreo, una noche sin luna y no podrás dejar que esta noche se vuelva a esfumar si te aferras a mí con fuerza. Agárrame la mano y despide el día a mi lado. El vapor que se condesa en las paredes entra fuerte en mis pulmones, sube por el interior de mi cuerpo, y descoloca los esquemas que me fijé la noche anterior. Vamos a afrontar esta noche con fuerza, sin complicaciones y sin preocupaciones. Para el reloj, detén el tiempo, cambia el orden y altera la naturaleza de las cosas. Mantente arriba, por que tu sonrisa seguirá brillando, y una noche como hoy, en la cual no hay luna, ya ésta no podrá ponerse celosa por tu resplandor, así que no te preocupes de nada. A pesar de que todas las estrellas se están desvaneciendo, no trates de huir, las verás algún día, pero simplemente se como tú eres; sin aditivos, sin añadidos, simplemente tú y tu verdad, ambos entrelazados en un mismo ser, porque puede que hoy sea la noche en la cual me enamore de ti.



lunes, 14 de febrero de 2011

Indecisión.

Paradas, subidas y bajadas, vueltas al principio, regresos al final. Nadie dijo que fuera fácil, pero aquí, una vez más, estás tú, tu corazón, y un puñado de tus propias reflexiones que zumban y se mueven rápidamente en tu diminuta cabeza. Rebotan contra todo lo que encuentran a su paso, te provocan mareos, dudas, indecisiones, dolores de cabeza no recomendados... pero sabes que no puedes hacer nada para evitarlo. Solo te odias a ti mismo por tener esa débil personalidad, por ser así de fácil, por dejarte engañar tan repentinamente. Y lo peor de todo es que lo sabes, y te duele. Con simples palabras te convencen, con grandes acciones te afirman, con sucios actos de despiden y con ruines hechos te deprimen. Una simple historia contada en una simple línea. Tu triste y simple historia contada en un breve párrafo. Al fin y al cabo no deja de ser algo tuyo, algo a lo que has acabado acostumbrándote. Sin ese dolor ya no eres el mismo, forma ya parte de ti y no sabes cómo desprenderte de él. El final de la historia, oscuro y maldito, porque aunque te niegues a admitirlo, sabes que será así el resto de tu vida.




domingo, 13 de febrero de 2011

Efímero momento.

Un momento lleno de miedo, lleno de vergüenza y sobre todo, un momento lleno de pensamientos y divagaciones. Pero en un mísero segundo extraes un fuerte impulso nervioso de tu interior que te ayuda a que pases ese momento con firmeza, lleno de confianza y de seguridad, lleno de orgullo y ambición y todo pasa, cual   efímero parpadeo, de una sensación de temor a una sensación en la cual notas que si te lo propones eres capaz de hasta volar. Lo notas cerca de ti, notas cómo respira, cómo se mueve, cómo te agarra, cómo te besa, cómo te elevas, cómo vuelas, cómo sonríes y cómo lo odias por lo tanto que te gusta.



viernes, 11 de febrero de 2011

Historia de una vida.

Y puede que la vida no te esté sonriendo, puede que no te mire a los ojos ni que te prometa un futuro idílico, puede que sólo te atormente y te incite al pecado, a la desesperación y a tu íntegra perdición, pero aun a pesar de todo esto, haz que todo en tu vida sea mágico, dale un sentido especial a las cosas, a los hechos y a los sucesos. Vive tu presente, porque es único e irrepetible, escucha las palpitaciones de tu corazón, cómo se agita, cómo se mueve y cómo bombea la sangre, cierra los ojos, inspira y espira, ahora ábrelos, mírame fijamente, deja que la sonrisa que surge del fondo de tu interior vea la luz,  deja que todo fluya como en un cuento de hadas, sin pausa, siguiendo la leve melodía que marcan nuestras pulsaciones, deja que el leve susurro de este cálido aire  juegue con tu pelo, deja que mis manos graben el futuro de esta historia. Te permito ser el héroe de ella, siempre y cuando me prometas que, mientras yo exhale mi último beso, tú serás quien lo lleve consigo hasta el final del capítulo.

Vuelta al pasado.

Porque siempre que vuelves la vista atrás, hay pequeños momentos de tu vida que te evaden del mundo y consiguen que una tímida sonrisa asome entre las comisuras de tus labios. Porque sabes que darías todo por revivirlos. Porque sabes, que sin esos pequeños momentos, tu vida no tendría ningún sentido.


Ataduras.

¿Cuánto tiempo crees que podré bailar sobre tu mano sin echarme a perder?. Nunca olvides que al final el siervo será el amo, que la misma luz que me ciega será la luz que me salve. Y será entonces cuando tú me echarás de menos tanto, y yo, ajeno a tu vida no te prestaré atención. Puedo ser todo lo que tú quieras, todo lo que desees, pero cuando tú vengas a mí ya será demasiado tarde. Y nadie me pondrá etiquetas para anclar mi vida. Nadie me dirá que jamás alcanzaré la cima que yo quiera ascender. Ninguna cuerda conseguirá atarme a ti, nada que me convierta en tu posesión. Ataduras místicas que se desvanecen entre rayos de luz, porque ya, cuando tu vengas a mí, será demasiado tarde...

martes, 8 de febrero de 2011

Deseo de cosas imposibles.

Un sol cálido que calme mi cuerpo, una brisa suave que se lleve mis pensamientos, un soplo de vida que reviva mis sentidos, una gota de esperanza que inunde mi corazón, un fuerte tranquilizante que aplaque mis sentimientos, un gramo de heroína que sede mi cerebro, una inyección de adrenalina que revitalice mi interior, una palabra que reviente mis oídos, un hecho que marque mi vida, una fecha que escribir en mi cuello, un olor que recordar, una vida que memorar y una muerte que llorar.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Mañanas de invierno.

Ven, acércate a mí, hazme recordar todo lo que he vivido a tu lado. Mírame fijamente a los ojos y dime que me quieres, entonces las tornas cambiarán y yo seré quien dirá: ¨¿mucho?¨ y tu me responderás: ¨No, mucho no, muchísimo¨. Ven, acércate a mí, quiero sentir de nuevo tu aliento rozando mis labios, quiero sentir como tus manos recorren de nuevo mi cuerpo, como con un simple beso haces que me olvide del mundo, porque hecho de menos tus despertares, porque hecho de menos el quererte y el odiarte al mismo tiempo. Y ahora... ¿cuando podré esperar a que despiertes una tenue mañana de domingo, mientras yo, atento a tus movimientos, te miro fijamente durante largas horas? Sinceramente no sé muy bien cual es la respuesta, pero espero que tengamos por delante muchas frías mañanas de invierno que compartir, porque tú, me enseñaste que se puede querer lo que no ves.





Ni tú ni nadie.

Te crees superior, más fuerte que el resto, más osado que tu propia sombra, más creído que tu propio reflejo, pero eso no te da ni motivo ni derecho para que me trates como un miserable juguete roto, para que me muevas a tu antojo, para que tejas sobre mí los invisibles hilos que me manejarán en escasos segundos. Tus sucias y falsas palabras ya embelesan suficientemente a mi desequilibrado corazón, así que para, no juegues más conmigo y déjame en el sitio en el que estoy. Ya no tendrás ningún poder sobre mí, ya no me dominarás, ya no serás dueño de mis actos. Por fin seré libre, aunque con una libertad condicionada, porque, aun siendo libre, seré adicto a ti, adicto a tus ardientes besos, adicto a mi marca de heroína preferida. Porque ni tú ni nadie podrá conseguir que te olvide tan fácilmente, porque que te quede claro, ni tú, ni nadie, podrá conseguir que deje de quererte como el primer día de esta catastrófica historia.



lunes, 31 de enero de 2011

La ausencia de tu persona.

Has desaparecido, como todo lo demás. Estoy perdido y sin rumbo. Cuando te fuiste te llevaste todo contigo, todo… Pero veo tu fría ausencia allá donde mire, es como si algo me estuviera perforando el pecho, como si miles de afilados cuchillos se clavaran en mi mutilado corazón. Veo cómo éste se rompe en infinitos pedazos, y yo, soy incapaz de recomponerlo si tú no estás, pero en cierto modo me alegro, el dolor es la única confirmación de que tú realmente existías de que todo lo que pasó, realmente sucedió, de que todo existió y de que nada fue producto de mi esquizofrénica imaginación...



lunes, 24 de enero de 2011

Ven.

No me preguntes el por qué, no me hables, cállate de una vez. Cierra los ojos, siente cómo tu corazón bombea tu sangre, nota cómo se te erizan todos tus pelos, cómo un escalofrío recorre todo tu  cuerpo, cómo mi boca desgarra tus labios, cómo mi lengua memoriza tu cuello, cómo mis ojos retienen tu cuerpo, cómo la noche es el único testigo de nuestro desenfreno. Simplemente ven, sin decir nada, sin articular palabra, sin preguntarte el por qué...



sábado, 22 de enero de 2011

Miénteme.

Miénteme, dime que me quieres, dime que me amas, dime que serás mío hasta el fin del mundo, que moriré cerrando mis ojos sobre tus cálidos brazos, que besaré todas las noches tu resplandeciente pecho, que me despertaré cada mañana mirando tus dulces ojos, que, día tras día, al mirarme a la cara, una sonrisa aparecerá por tu hermoso rostro cual fulminante meteoro atraviesa un oscuro universo iluminando todo a su paso. Miénteme, dime que eres feliz a  mi lado, dime que todo lo que pienso no es cierto, que nunca llegará el final que mi pobre corazón tanto teme. Miénteme, dime que no estás jugando conmigo, dime que todo será mas fácil ahora que estamos juntos, dime que no habrá nadie que pueda detenernos. Miénteme y dime que me llevarás contigo hacia las estrellas porque eso es lo que mi melancólico corazón quiere escuchar. Miénteme, miénteme como nunca me has mentido, como si la vida entera te fuera en ello, porque, aunque me mientas y mi mente sepa que lo haces, mi corazón nunca lo sabrá...


viernes, 21 de enero de 2011

2880 minutos.

Siempre quiso tu amor, siempre quiso tu corazón, tus ganas de vivir, tus ansias de libertad, pero nunca fue a por nada... y tú, mientras, desearías morir para ser de nuevo otra persona, para no repetir la misma historia, para no sufrir desde el primer día. No sabes lo que estará haciendo en estos momentos, lo que podrá hacer en dentro de unas horas, pero lo que si sabes es, que si un pensamiento fugaz recorre tu mente, tu corazón se acelera. Reconoces que nada de lo que sucede es real, que son meras imaginaciones de tu subconsciente, aunque esos 2880 minutos compartidos a su lado fueran los mejores de tu vida, sabes que él nunca quiso sentir nada por ti, nunca quiso robar ningún pedazo de tu marchito corazón, nunca te quiso demostrar que en el fondo de su interior era débil. Quería ser otra persona, alguien en el cual pudieras confiar, alguien a quien pudieras amar... alguien que tras vivir a su lado pudiera recordarte, desgarrando tu interior, que seguirás siendo un infeliz el resto de tu vida...


La calidez de un rayo.

Y aunque la tristeza inunde tu corazón, siempre habrá un cálido sol que brille y alumbre tu vida...

martes, 18 de enero de 2011

Un estrellado firmamento

Mi vida era como una noche sin luna antes de encontrarte, oscura, fría y tenebrosa, pero al menos había estrellas, puntos de luz y motivaciones... Y entonces, tú cruzaste mi cielo como un meteoro. De pronto, se encendió todo, todo estuvo lleno de brillantez y belleza. Cuando tú te fuiste, cuando el meteoro desapareció por el horizonte, todo se volvió negro. No había cambiado nada, pero mis ojos habian quedado cegados por la luz. Ya no podía ver las estrellas, ya nada tenía sentido para mi. Me di cuenta de que tu luz inundó mi cara y me llenó de una sensación de alegría inmensa y también, de que en ningún momento habías desaparecido por el horizonte, sino que seguías aquí, conmigo.Entonces fue cuando pensé que ya nada podía volver a ser como antes...oscuridad...no, tu destello, tu brillo, tu belleza llenó mi universo de luz,de pinceladas de color, de felicidad... Ninguna otra estrella tenía comparación contigo, ya que te alzabas entre ellas como te as alzado en mi corazón, ocupándolo todo, llenándolo todo con tu resplandor, con tu luz, iluminando mi vida......Nada volverá a ser lo mismo pensé... y nada es lo mismo. Mi vida a cambiado completamente y ya tienes un puesto especial en mi en mi corazón, en un estrellado firmamento en el que lo único que destaca, brilla intensamente y me da fuerzas para seguir adelante eres TÚ.



domingo, 9 de enero de 2011

Y la tormenta paró.

Y cuando yo veo tu dulce sonrisa mis lagrimas recorren mi cara…

y ahora que soy fuerte he comprendido cómo este mundo se vuelve frío y atraviesa mi alma, desgarra mi corazón, embelesa mis sentidos, acuchilla todo mi ser, y se lleva lo más importante que queda en mi…
Pero a pesar de todo esto nunca te dejare caer, nunca dejare que te des por vencido, me levantaré contigo siempre, haré que cada día sea especial para ti, que cada momento sea inolvidable,estaré ahí por ti y para ti, a pesar de todo, aun cuando salvarte signifique mi muerte.




Una dulce venganza.

- y tú... ¿te acuerdes de aquella tarde cuando a la luz de los últimos rayos de sol me juraste tu amor?

+ si me acuerdo, por supuesto que me acuerdo....
- prometiste no romperme nunca el corazón.
+sí lo prometí y creo que nunca lo he hecho.
-¿nunca? ¿tan seguro estás? nunca digas nunca..... mi corazón ya esta roto por tanto rompiste tu promesa
+no nunca te lo he roto, ni lo haré recuerdalo bien, aquella noche te dije: la muerte podra esperarme y apagarme mi vida, pero nunca se apagará este amor que yo siento por ti.
- ¿entonces porque te vas?
+no me voy, simplemente llego mi hora y nunca te abandonaré te lo prometí….
-¿Sabes? Estoy ya cansada de tanto mentiras…. Una vez me dijeron que no me fiara de los besos que se dan a media noche, y mucho menos si esa noche hay luna llena. Recuerda el atardecer, recuerda la noche, recuerda la luna, recuerda el frío y recuerda tu beso…
+ nunca he creído en esas cosas y lo sabes.
- creo que deberías de empezar a hacerlo ¿no crees? Pero bueno da igual que se esfumen los besos, podía tirarlos, podía desperdiciarlos, podía romperlos….tus fotos, tus cartas, tus palabras, tus sentimientos… ¿que mas dan ya? Al diablo todo, al diablo tu ya no significan nada, ya no significas nada para mi. Creías que podrías engañarme con la ventaja de tu juego pero una vez mas yo te volví a ganar y ahora yo soy la que te dice que la venganza será muy dulce…


0/0/0

Y un día más la noche cae sobre la ciudad. Un día más que no se nada de él, un día más de sufrimientos... Ya van tantos que he perdido hasta la cuenta... Se fue tan pronto como vino, como si se lo hubiera llevado el viento, como si hubiera permanecido en el olvido, sin una despedida, sin un adiós, sin un te quiero. Y a veces pienso si él realmente existió, una vez me dijeron que la perfección no existe, y el era perfecto, por tanto era inexistente, un mero producto de mi imaginación , ¿pero que hacer si aún recuerdas sus besos?¿si aún recuerdas su cara?¿si aún le recuerdas...? El príncipe de una historia infinita, de un cuento de otro mundo, el protagonista de mi historia... Una historia perfecta y eterna. Palabras vanas, eternidad, perfección... Nada es perfecto ni eterno, todo tiene un principio y un fin. Sólo quedará ese dolor que me atormenta día tras día, que perfora mi pecho cada noche cuando yo, iluso de mi mismo, sigo imaginando una vida a su lado, ese dolor que transforma todos los días y los vuelve grises, y que ahoga mi llanto. Perdido, sin rumbo, ya sin una historia que contar. El fin, frío y cruel...pero todo fin tiene un principio, un nuevo comienzo, el comienzo de una nueva historia... No quiero dolor, no quiero sufrimiento, lo único que quiero es un nuevo príncipe, alguien que con solo mirarme me lo diga todo, que sobren las palabras, alguien que me haga evadirme de este mundo para tomar un respiro y que me haga ver que junto a él soy capaz de hasta volar. Me sigo preguntando que quien será el indicado y siempre obtengo la misma respuesta, alguien que cambie todos mis sentidos, cuando mi vista escuche todos los sucesos, cuando mi oído vea todos los ruidos, cuando mi tacto saboree todas las formas, cuando mi gusto olfatee todos los sabores, cuando el olfato palpe todos los olores, alguien que con una simple sonrisa haga que mis miedos se esfumen, alguien que con un simple beso haga sentirme lo que nunca nadie antes consiguió, alguien que con una simple caricia haga estremecerme por dentro, alguien que de sentido a mi vida, alguien que aún muerto de dolor consiga levantarme, alguien que nunca me deje caer..


Libérate.

Invítame a tu corazón, ábreme la puerta que conduce a él, dame la llave que desvela todos tus secretos, la contraseña para acceder a cada parte de tu ser, préstame la transcripción de tus deseos, muéstrame tus sueños más ocultos, todas las locuras que por un momento pasaron por tu cabeza, dime todo lo que nunca te atreviste ha hacer, todo lo que nunca dijiste, porque ahora es el momento, el momento de la verdad, es tiempo de que hagamos todo lo que nunca hicimos, que digamos lo que nunca nos hemos dicho, porque nos sentimos más fuertes, no hay nada ni nadie que pueda vencernos. Déjate llevar, deja que tus sueños te inunden, puedes caerte, sí, no te lo voy a negar, pero cáete seguro, sabiendo que yo estaré aquí para nunca dejarte caer y ayudarte a levantarte. Guíame por lo más profundo de tu ser, sólo quiero conocerte, quier invadirte, que ambos seamos uno. Dame la clave que contiene tus sentidos, libérate y se libre, libre a mi lado.

Desaparece...

Y una mañana te despiertas, un rayo de luz golpea tu cara y repentinamente abres los ojos. Maquíllate corriendo, no dejes rastros de lo que ocurrió anoche. Tu futuro parecía tan brillante... pero todo se tornó en tu contra. Llévame hasta los extremos, aunque hallas perdido la cabeza, sigue siendo el héroe de esta historia. Trato de correr, pero no quiero alejarme, solo quiero desaparecer entre el humo de nuestros recuerdos.


martes, 4 de enero de 2011

Punto de Congelación.

Y llegas a un punto en el cual tu corazón se congela, un punto en el cual nada brilla a tu alrededor, y todo el color que anteriormente veías atravesando tan cortante tus pupilas, ahora se desvanece entre pequeñas nubes de niebla. Todo parece tan irreal y subjetivo... ya nada tiene el mismo significado que antes tenía. Una caricia, una mirada, un suspiro, un beso y un triste adiós. Las cinco cosas que transcurrieron en tus cinco últimos minutos. Trescientos míseros segundos de completa agonía, de insufrible dolor y de profunda tristeza. Sucedió todo tan deprisa que no te diste cuenta de las consecuencias que eso conllevaría, y ahora, inocente de ti, te arrepientes de lo que sucedió. Poco a poco sentiste como el escalofriante frío se apoderaba de tu cuerpo, paso a paso, centímetro a centímetro, sentido a sentido, y cómo tu corazón se enfriaba lentamente. De lo más disperso a los más concentrado, de los más tierno a lo más triste, de los más bonito a lo más horrendo, como una dulce herida en la cual la sangre no es más que sentimientos, sentimientos que se transforman y cambian extremadamente en tan solo un maldito segundo. Y de repente, tu corazón deja de latir, se ha congelado, y ya nada puedes hacer para volver atrás. Es un proceso continuo e irreversible, en el cual, una vez empezado, no puedes salir de él hasta que se apodera de todo tu cuerpo. Un proceso cruel y lento, pero sobre todo, un proceso devastador. Acaba con tu esencia, con tu ser, con lo más profundo que guardas celosamente en tu interior, con lo que no te atreves a confesar a nadie, con lo que nunca dijiste, con lo que nunca dices y con lo que nunca dirás. Ya nadie tiene la suficiente importancia para ti, ya nadie puede ayudarte, nadie puede salvarte, nadie será ya tu héroe. Y mientras sientes cómo el helador frío acaba por recorrer los últimos conductos que permanecen unidos a tu cerebro, dejando todo un fúnebre rastro de muerte a su paso, sientes cómo unas palabras viene a tu mente por última vez, unas palabras que ya no te traen recuerdos, algo que siempre te sacaba una sonrisa, unas palabras que suena en lo más profundo de tu alma, que te desgarran desde el interior, unas palabras que, mientras exhalas tu último aliento y tus pupilas se dilatan al máximo, se repite una y otra vez en tu interior: " te quiero".